A lo largo de nuestra vida, muchas serán las ciclogénesis que nos impidan salir de casa, seguir adelante, y otras muchas serán, además, explosivas. Sin embargo, tenemos que comprender que la vida es demasiado bonita como para no vivirla con el volumen a tope, hay que luchar por un futuro que nos pertenezca, y por un presente que nos haga sonreir. Superar esos obstáculos, ir a contracorriente, y no dejar que nos derrumbe el viento, nos hará sentir más fuertes, más personas. Buscando un simple equilibrio entre lo que está bien, y lo que está mal, entre los malos y buenos momentos, conseguiremos disfrutar de cada momento, cada sonrisa, cada mirada, cada aliento.
Porque, al fin y al cabo, la vida es una tormenta perfecta.
que texto sandra que texto!
ResponderEliminary ya iba siendo hora de que recuperases tu blog
ehhh...
tequieroo
Huy muahahah eso cress tu que no te ha dicho tu mama que no vas a paris porque ya has ido muchas veces XD
ResponderEliminartequieroo